Volviendo a la co-herencia y a la pre-gunta

Pensamientos complejos 

 

Dijo Sigmund Freud: “Existen dos maneras de ser felices en esta vida, una es hacerse el idiota y la otra es serlo”. Este pensamiento es complejo como la complejidad de todo pensamiento de los otros; y en este caso, tiene tanto que ver con el nuestro. Porque si el pez por la boca muere, debemos reconocer que más de una vez debe uno quitarse el anzuelo de la boca por lo dicho: No hay que ser alcahuete. Debemos buscar la verdad. Es mejor decir siempre la verdad. Los hijos se educan con el ejemplo. Hay que detener la corrupción. No es posible que siempre se coimee a la autoridad. La policía tiene la corrupción en su seno. Yo voté al presidente elegido. Yo voté al presidente que está renunciando (abdicando).

 

Hay que ser solidarios. Se debe trabajar por la distribución de la riqueza. El que no arriesga no tiene. Lo único importante es la salud… Mi pudor no me permite escribir esto sin cierta vergüenza, porque he querido no ser autorreferencial en semejante dilema: ser o no coherente. Imaginen ustedes si este capítulo contuviera la expresión: “Nosotros, los coherentes, les decimos a la sociedad cómo debe mantenerse frente a bla, bla, bla…”. Pero tampoco quiero escabullirme tras la falsa modestia y escribir como si lo hiciera acerca de revocar una pared o poner al horno una ensaimada. Por eso digo, entonces, que yo jamás he pretendido morirme sin ganar una batalla. En esa batalla uno mismo es el soldado, el general, el plan, la trinchera, las armas y, más que nada y lo más difícil de enfrentar, el enemigo mismo. Vivir en la coherencia lleva implícito el pensamiento rebelde y las palabras que se “revelan” en los actos, y los actos que se “revelan” ante las palabras.

 

Ilustración

Hay que animarse a dar portazos en la vida porque, de alguna manera, eso también ilustra, en pocas líneas y muy finitas ellas, muestro ser en el mundo. Puedo decir que una de las grandes satisfacciones de un hombre es la de sentir que siempre hizo lo que creyó que debía hacer, mas allá de consecuencias cómodas o incómodas. A veces, midiendo las consecuencias, y aún así, animándose a ser coherente. Y en otras, en las de las definiciones que se toman con las tripas, sin siquiera medir las consecuencias. Uno allí quiere morir con las botas puestas, y es ése su máximo reconocimiento.

Pero ¿sólo importa el reconocimiento propio o también se construye con el de los demás? Importa tanto, que uno debe convivir con la coherencia de su estómago para soportar lo que lo indigna, lo que lo daña, lo que lo humilla y lo pervierte; y con la mirada de una familia que aguarda que ese humano conserve su empleo para mantenerlos a ellos, porque los inocentes chicos no tienen la culpa de que su padre-madre no pueda tragarse un sapo y esquivar las esquirlas de la dignidad que refiere a lo que alguna vez proclamó a viva voz: “¡yo hubiera renunciado si me hubiera ocurrido tal cosa!”. ¿Uno es fiel a lo que dijo o es fiel a la conveniencia? ¿Para qué sirve la coherencia si te hace sufrir tanto y, más aún, hace sufrir tanto a quienes amás?

 

Emprendedores 

La lucha que emprendemos con nosotros mismos para no perder es por momentos tan encarnizada, que el empate podría ser una posibilidad más que anhelada cuando uno debe definir quién es. He allí cuando la coherencia de los grandes se convierte en una bandera que difícilmente pueda ser sostenida por acomodaticios. Hubo y hay personas y personajes –cada quien sabrá– que de una u otra manera enarbolan ese paño que señala dónde estaban y están nuestros sueños, junto a la utopía de poder compartirlo con los demás, para que contagie coherencia entre los actos y las palabras.

Además de los personajes cercanos, aquellos a los que nos animamos a clasificar o calificar como coherentes, podríamos citar también a…, podríamos citar a…, podríamos citar a… a… ¡la coherencia tiene un encanto que no siempre entona con los demás!

 

Los pensamientos complejos son procesos mentales que involucran una variedad de ideas, conceptos, conexiones y consideraciones que requieren un alto nivel de cognición. Estos pensamientos a menudo se asocian con la resolución de problemas, la toma de decisiones difíciles y la comprensión de conceptos abstractos:

1. Abstracción: Los pensamientos complejos a menudo implican la capacidad de pensar en términos abstractos y conceptualizar ideas en lugar de centrarse únicamente en lo concreto.
2. Análisis crítico: Requieren un análisis crítico de la información disponible, considerando múltiples perspectivas y datos relevantes.
3. Conexiones: Los pensamientos complejos suelen involucrar la conexión de ideas o conceptos aparentemente no relacionados para llegar a soluciones o conclusiones.
4. Creatividad: La creatividad desempeña un papel importante en los pensamientos complejos, ya que a menudo implica la generación de ideas novedosas o la búsqueda de soluciones innovadoras.
5. Toma de decisiones: La toma de decisiones difíciles y la evaluación de las implicaciones de diferentes opciones son ejemplos de pensamientos complejos, ya que a menudo involucran sopesar múltiples factores y consideraciones.
6. Resolución de problemas: La resolución de problemas complejos a menudo implica descomponer un problema en sus componentes y buscar soluciones paso a paso.
7. Consideración de consecuencias a largo plazo: Los pensamientos complejos a menudo requieren considerar las consecuencias a largo plazo de las acciones y decisiones.
8. Pensamiento crítico: Implican el uso del pensamiento crítico para evaluar argumentos, evidencia y razonamiento.

 

 

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🔗 Co-herencia como modo de existir

Desde el pensamiento complejo, la co-herencia no es solo alineación interna (pensar, sentir, hacer), sino una forma de entrelazar dimensiones:

• El individuo con el colectivo

• La razón con la emoción

• La experiencia con el conocimiento

• El pasado con el porvenir

• Lo que somos con lo que estamos llegando a ser

Co-herencia es vivir en red consigo mismo y con el mundo, sin necesidad de ser lineales ni perfectos. Es aceptar que la vida no es una estructura rígida, sino un tejido en movimiento.

🌱 Ser co-herente es, muchas veces, sostener tensiones sin romperse.

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❓ La pre-gunta como umbral

La pre-gunta no es simplemente una búsqueda de respuesta.
Es un acto de apertura, una forma de decirle al mundo: «no lo sé todo, pero quiero saber contigo.»

• “Pre” indica anterioridad, pero también preparación.

• “Guntar” (del latín quaerere) implica buscar, indagar.

Entonces, la pregunta auténtica no se lanza para cerrar un tema, sino para abrir territorio, para tensar la mente y el alma, para co-habitar el misterio.

💭 La pre-gunta es un ejercicio de humildad y valentía a la vez.

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🧠 El pensamiento complejo como marco

El pensamiento complejo (Morin, Maturana, Deleuze, entre otros) nos invita a:

• Abrazar la incertidumbre sin caer en el caos

• Reconocer que toda identidad está en relación

• Entender que los opuestos no siempre se anulan, a veces se nutren

Desde ahí, co-herencia y pre-gunta no son opuestos, sino tensiones creativas:

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🌌 Una ética y una estética del pensar-vivir

Volver a la co-herencia y a la pre-gunta no es solo un ejercicio teórico, sino una práctica cotidiana:

• Habitar las contradicciones sin negarlas

• Preguntarnos no solo ¿qué hago?, sino ¿desde dónde lo hago?

• No apresurarse a responder, sino vivir la pregunta, como decía Rilke