Poder, autoridad y liderazgo

Connotación

 

En nuestro país son muchas las personas para las cuales la palabra liderazgo tiene una connotación negativa. Se identifica al líder como aquel que pretende imponer su voluntad para alcanzar sus fines y defender sus propios intereses. Y esto no es casual. Desde mi punto de vista, la razón principal por la que nuestro país todavía se debate entre el presente y el pasado deberíamos buscarla en el rotundo fracaso de una dirigencia incapaz de lograr una visión común de país, alcanzar acuerdos básicos y construir sobre los aciertos de sus antecesores. Nos ha faltado grandeza.

 

El liderazgo, sin embargo, no es algo negativo. Es imprescindible para que los ciudadanos de una nación se encuentren en un destino común. Ya sea que pensemos en el país como un todo, en sus empresas, en organizaciones sociales o religiosas, el liderazgo será siempre uno de los elementos más críticos para su efectivo desarrollo y funcionamiento. Una sociedad sin líderes es una sociedad en caos. Pero, ¿qué es el liderazgo? ¿De qué hablamos cuando hablamos de liderazgo? Creo que de diferentes cosas y muchas de ellas, hasta contradictorias. Pero antes de contestar estas preguntas, propongo que nos detengamos brevemente en los significados de poder y autoridad, dos conceptos estrechamente relacionados con el de liderazgo. La palabra poder proviene del latín potestas y significaba para los romanos la capacidad legal que tenía el gobernante de hacer cumplir su voluntad.

 

Comunidad

Se trataba del poder socialmente reconocido; el poder que la comunidad organizada otorgaba al gobernante a través del derecho (imperium); de la capacidad de imponer, de forzar, de ejecutar, de reclamar obediencia. El poder de la coacción. En nuestros días, entendemos el poder como un concepto que va más allá de la ley. Max Weber señala que el poder es la capacidad de forzar o coaccionar a alguien, para que haga nuestra voluntad debido a nuestra posición o nuestra fuerza. Poder es, por lo tanto, imposición, dominio, orden. Dependiendo de su origen, de las circunstancias en la que se lo utiliza y de la manera en que se lo ejerza, el poder podría ser considerado legítimo o ilegítimo, oportuno o inoportuno, sabio o imprudente.

La palabra autoridad también proviene de los romanos (auctoritas) y hacía referencia al ciudadano que se había ganado el respeto de los otros por su experiencia, valores y trabajo realizado a lo largo de su vida. Para tener autoridad el romano debía trabajar arduamente, ganar una buena experiencia y respetar una serie de valores sociales (uno de ellos, el respeto a los que lo rodeaban). Se trataba del saber socialmente reconocido. Allí donde terminaba el poder, comenzaba la autoridad ya que ésta no ordena sino aconseja(1). En la autoridad “está supuesta la exclusión del uso de la fuerza, dado que, cuando se ejerce la autoridad, no hay necesidad de recurrir a la coacción para obtener sumisión u obediencia”(2).

 

Autoridad

La autoridad requiere del reconocimiento del otro. Hoy se entiende la autoridad como un atributo de la persona, una característica que la define, que involucra su carácter y la manera en que se relaciona con los demás. Es lo que los otros ven en nosotros lo que nos confiere la autoridad. El Liderazgo es, según el diccionario de la lengua española, “la dirección, jefatura o conducción de un partido político, de un grupo social o de otra colectividad”. Se refiere a la dirección de las personas y a los grupos que ellas conforman. Esta definición nos habla del qué mientras nada dice del cómo, de la forma de ejercerlo.

En general, cuando hablamos de liderazgo, hacemos referencia indistintamente a aquel que se ejerce por medio de las potestas o de las autorictas. Para algunas personas, liderazgo es sinónimo de poder y para otros de autoridad. Sin embargo, poder y autoridad no son sinónimos de liderazgo. Mientras que liderar es acción, poder y autoridad constituyen atributos de ese liderazgo, formas de ejercerlo. Se lidera utilizando el poder o la autoridad: se impone, coacciona y obliga, o se sugiere, invita e influye. Dos maneras, dos estilos; ni buenos ni malos en sí mismos. Serán en todo caso apropiados o inapropiados, dependiendo de las circunstancias y las personas. Por otro lado, las potestas y las auctoritas no siempre van de la mano en el despliegue del liderazgo, ya que el líder puede tener poder sin autoridad, autoridad sin poder, y poder con autoridad.

 

«Poder», «autoridad» y «liderazgo» son conceptos relacionados pero diferentes que se utilizan para describir las relaciones de influencia y toma de decisiones en diversas situaciones:

1. Poder:
   • El poder se refiere a la capacidad de una persona o grupo para influir en las acciones, pensamientos o decisiones de otros individuos o grupos. Puede manifestarse de diversas maneras, como el poder político, económico, social, coercitivo, o incluso el poder personal.
   • El poder puede ser ejercido de manera legítima o ilegítima, y puede derivarse de factores como la riqueza, el conocimiento, la posición social, la fuerza, la persuasión, entre otros.
   • El poder en sí mismo no garantiza que las decisiones tomadas sean las mejores o más éticas; simplemente implica la capacidad de influir en otros.
2. Autoridad:
   • La autoridad se relaciona con el derecho legítimo de una persona o entidad para tomar decisiones y ejercer influencia sobre otros en una organización, una institución o un sistema. La autoridad a menudo se deriva de roles, cargos o posiciones en una jerarquía o estructura organizativa.
   • La autoridad se asocia con el respeto y la aceptación de la toma de decisiones por parte de quienes están sujetos a ella, debido a la creencia de que las decisiones son legítimas y justas.
   • Mientras que el poder puede ser ejercido sin necesariamente contar con la autoridad, la autoridad se basa en el reconocimiento y la legitimidad de la posición o el cargo.
3. Liderazgo:
   • El liderazgo es la capacidad de una persona para influir y guiar a otros en la consecución de metas o la toma de decisiones. No todos los líderes necesariamente tienen autoridad formal o poder.
   • El liderazgo puede basarse en la habilidad personal, la carisma, el conocimiento, la experiencia o el ejemplo. Los líderes a menudo inspiran y motivan a su equipo o seguidores para lograr un objetivo común.
   • Los líderes pueden surgir en una variedad de contextos, desde el liderazgo político y empresarial hasta el liderazgo comunitario y personal.

 

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💥 1. El poder: connotaciones ambivalentes

El poder es uno de los conceptos más antiguos y polémicos de la historia humana. Su connotación depende del uso que se haga de él.

✅ Connotación positiva del poder:

• Capacidad de hacer que las cosas sucedan

• Habilidad de transformar realidades

• Energía disponible para impulsar proyectos colectivos

❌ Connotación negativa del poder:

• Dominación, manipulación o sometimiento

• Control unilateral sobre otros

• Uso del poder para intereses personales

El poder, entonces, no es bueno ni malo en sí, pero su ejercicio revela la ética del liderazgo. Hay un poder que empodera a otros, y otro que los aplasta.

“El poder se vuelve legítimo cuando se convierte en posibilidad para todos, no en privilegio de unos pocos.”

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🧭 2. La autoridad: connotación de legitimidad y reconocimiento

A diferencia del poder, la autoridad se construye y se otorga. No depende del cargo ni de la fuerza, sino del reconocimiento de los otros.

Connotaciones esenciales de la autoridad:

• Legitimidad: se basa en la confianza y el respeto ganado

• Coherencia: surge de la congruencia entre palabra y acción

• Saber-hacer: implica competencia, integridad y presencia

Un líder con autoridad no necesita gritar, ni controlar. Su influencia proviene de la credibilidad, del ejemplo, y de la conexión humana.

“La autoridad se gana, no se impone. Se cultiva con paciencia, humildad y coherencia.”

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👤 3. El liderazgo: connotación de guía y sentido

El liderazgo se construye en la intersección entre poder y autoridad, pero añade una dimensión clave: el sentido. Es decir, liderar es también invitar a caminar hacia un propósito compartido.

Connotaciones del liderazgo:

• Inspiración: convoca sin forzar

• Visión: aporta una dirección, pero no impone un destino cerrado

• Acompañamiento: guía procesos, sin negar la autonomía de los demás

• Escucha: reconoce la diversidad como una riqueza

Cuando el poder y la autoridad se articulan con sentido y propósito, nace un liderazgo con connotación transformadora y humana.

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🔁 4. Combinaciones posibles y sus consecuencias

Esto muestra que el liderazgo sin autoridad se vuelve débil, y el poder sin liderazgo se vuelve peligroso.

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🧠 5. Re-significar el poder desde el liderazgo ético

Es urgente recuperar una connotación más saludable y propositiva del poder: no como dominio, sino como capacidad de generar bienestar colectivo. Y eso solo se logra cuando:

• El poder se comparte

• La autoridad se gana

• El liderazgo se ejerce con propósito, empatía y claridad