El viejo y el Nuevo Liderazgo

El viejo y el Nuevo Liderazgo

Evolución

 

El viejo liderazgo es aquel que descansa fundamentalmente en el poder. Es un paradigma de liderazgo que heredamos de instituciones verticalistas que han operado exitosamente a través de los siglos. Nuestro país heredó esta forma de entender el liderazgo y la aplicó desde sus inicios a sus instituciones políticas, sociales, empresariales y culturales. El liderazgo entendido como sinónimo de poder penetró nuestra forma de pensar y actuar en el mundo. Muchas instituciones aún son lideradas con este paradigma. Y no sólo las organizaciones políticas, los sindicatos y las empresas, sino también las organizaciones de la sociedad civil, las de la cultura y el arte responden al poder como principal estímulo.

 

Se trata de un estilo que nos atraviesa a todos como sociedad, como parte de nuestra cultura. Creemos, sin embargo, que las cosas están cambiando lentamente. La Argentina, a pesar de sus inconvenientes, va evolucionando. La idea de libertad y el apoyo al sistema democrático es un hecho consolidado en las mayorías de la sociedad actual. Hoy son inaceptables algunas alternativas políticas de otras épocas. Ha pasado mucha agua bajo el puente. Por otro lado, el impacto de los medios de comunicación y de la tecnología disponible (Internet, telefonía celular, etc.) modifican la relación de poder entre gobernantes y gobernados, gerentes y empleados, líderes y liderados.

 

Posibilidades 

Los que antes simplemente obedecían, hoy tienen nuevas posibilidades de rebelarse frente un viejo poder que cruje. El concepto de Nuevo Liderazgo impulsado desde INICIA y su Centro para un Nuevo Liderazgo, es una aproximación a un ideal. Son ideas que se fundamentan principalmente en la observación de la forma de actuar de líderes que, desde distintos lugares de la sociedad, están construyendo un país mejor. Estos líderes no actúan de cualquier manera para lograr sus fines. Son líderes que aun contando con poder, ejercen plenamente su autoridad ganada a través de su influencia en los demás. Y si nos detenemos a observar sus conductas diarias, advertiremos algunas características que, aunque desarrolladas en grados diferentes en cada uno de ellos, dan forma a lo que denominamos Nuevo Liderazgo.

El viejo y el Nuevo Liderazgo

Creemos que estas conductas pueden servir como guías de acción para construir liderazgos eficaces, nutritivos y centrados en el respeto y el desarrollo de los seres humanos. Esta manera de liderar está íntimamente ligada al concepto griego de agápe o de servicio que utilizamos en la actualidad. Los Nuevos Líderes están en todos lados, no se caracterizan por la edad, el género, la educación o la posición social. Lo que los caracteriza son las maneras de comportarse con los demás y, especialmente, con sus dirigidos. Este libro describe veintiuna conductas que hemos identificado en líderes de todo tipo y condición. No pretende ser una teoría ni mucho menos un dogma sino, simplemente, una guía de comportamiento para personas que quieran mejorar su calidad como dirigentes. Como hemos dicho en la Presentación, cada una de las veintiuna conductas es desarrollada por un líder que ha participado en alguna actividad del Centro para un Nuevo Liderazgo. Es importante insistir en que todos ellos no piensan de igual manera; que son imperfectos, que tienen tantos aspectos por mejorar como cualquiera de nosotros; que tienen co tradicciones y muchas veces se equivocan; que a veces, el carácter los traiciona y se ven posteriormente obligados a pedir perdón.

 

Valor personal 

Pero cada uno de ellos intenta diariamente llevar a cabo el agápe hacia su gente; porque tienen un valor personal y social reconocido por ellos, que los eligen indiscutiblemente como sus líderes. A continuación, enunciamos brevemente las conductas que hemos observado en los líderes que promueven un Nuevo Liderazgo y que proponemos como guías de acción:

 

1. La transformación personal: son conscientes de la necesidad de una transformación personal como base para cualquier cambio social sustentable. El liderazgo, en todos los casos, comienza por el liderazgo de uno mismo.

 

2. La ética y los valores: tienen un fuerte compromiso con la ética y con determinados valores, entendiéndolos como el fundamento de las relaciones entre las personas.

 

3. La coherencia personal: este compromiso no se manifiesta sólo por medio de sus palabras sino, principalmente, a través de una conducta coherente con los valores manifestados.

 

4. El respeto y el afecto hacia las personas: sienten un sincero respeto y afecto por las personas, a las que consideran de una manera integral más allá de roles específicos –político, empresarial, social, cultural– que sólo manifiestan aspectos parciales de la personalidad.

 

5. La responsabilidad social: observan la realidad con sensibilidad y actúan con responsabilidad social, conscientes de que los generadores de riqueza deben contribuir –junto con el Estado– a compensar las desigualdades que genera el sistema económico.

 

6. La democracia y la integración: creen en la democracia como único sistema de vida y entienden que sólo dentro de los márgenes de la ley una comunidad puede desenvolverse en paz. Asimismo, consideran que la integración interna y externa de nuestro país es clave para un desarrollo equilibrado y efectivo.

 

7. La vocación de servicio: actúan con una profunda vocación de servicio. Conciben la utilización del poder como servicio y no como beneficio personal.

 

8. Los deseos personales: sus deseos personales son los verdaderos motores de sus acciones; no actúan tanto por el deber sino por una fuerte vocación por lo que hacen.

 

9. Visión y convocatoria: son capaces de desarrollar una visión y convocar a otros a alcanzarla.

 

10. Los errores en la acción: deciden actuar aun sabiendo que cometerán errores.

 

11. Líderes y seguidores: saben desmitificar al Líder. Tienen claro que son simultáneamente líderes y seguidores ya que el buen liderazgo es un rol que se alterna y se construye con otros.

 

12. El aprendizaje y la continuación del trabajo: actúan de una manera sistémica para permitir que otros puedan aprender y continuar su trabajo. Su estilo es el de nutrir a los demás, enseñando y delegando roles y responsabilidades.

 

13. El bien común: no se limitan al interés sectorial ya que su principal objetivo es el bien común.

 

14. Idealismo, realismo y agente de cambio: son idealistas (sin ser ingenuos) y realistas (porque aceptan lo que es) actuando como verdaderos agentes de cambio al mejorar y transformar el contexto.

 

15. La humildad: actúan con humildad para reconocer lo que no saben y, por ello, creen en la necesidad de aprender permanentemente.

 

16. La persistencia y la tenacidad: son persistentes y tenaces para alcanzar sus objetivos; saben que deben soportar muchas frustraciones para construir lo que pretenden.

 

17. La creatividad: son creativos para abrir nuevos caminos y buscar soluciones a problemas complejos.

 

18. La flexibilidad: la flexibilidad, la búsqueda de consensos y una buena actitud negociadora los acompaña en su trabajo.

 

19. La asunción de riesgos: asumen riesgos guiados por un espíritu explorador que los aleja de la vida repetitiva.

 

20. La interpretación de la realidad: son buenos intérpretes de la realidad en la que trabajan diariamente.

 

21. Sumar, multiplicar e integrar: buscan sumar, multiplicar e integrar.

 

Evitan restar, dividir y derivar.

En los próximos capítulos podremos ver el desarrollo de cada una de estas conductas y comprender cómo hacen los Nuevos Líderes para lograr esa autoridad que se les reconoce. Invitamos al lector a analizar detenidamente cada una de estas conductas y a revisar sus propios paradigmas sobre la manera de concebir el liderazgo y administrar el poder. Cuestionar estos patrones psicológicos o modelos mentales es clave para que nuestro país pueda evolucionar efectivamente dejando de lado divisiones y autoritarismos que sólo han creado y siguen creando sufrimiento.

El viejo y el Nuevo Liderazgo

Recordemos que no vemos el mundo como es, sino como somos nosotros. Para finalizar, creemos firmemente en la necesidad de incluir el Liderazgo como uno de los temas centrales de la educación de nuestros jóvenes. Acelerar el cambio, promoviendo una cultura de paz y respeto hacia nuestros semejantes, parece ser indispensable en estos tiempos. Es hora de construir entre todos, pero especialmente entre los miles de líderes de la Nación, las bases de una Argentina distinta, más permeable a nuevas ideas, respeto a la ley y, principalmente, al hombre, como destinatario final de todo objetivo social.

 

Editorial Luis Bonilla. Expertos en enseñanza, formación a distancia, tutores cualificados y con variedad de cursos online.

 

 

 

🏛️ 1. El viejo liderazgo: autoridad, control y jerarquía

Durante siglos, el liderazgo se asoció con el poder ejercido desde la autoridad formal. Este tipo de liderazgo estaba centrado en la figura del líder como:

  • Fuente única de conocimiento y decisiones

  • Representación de la fuerza, el control y la verticalidad

  • Ejecutor de órdenes, con énfasis en la obediencia y la disciplina

  • En muchos casos, reproducía estructuras militares, patriarcales o empresariales rígidas

🔒 Características del viejo liderazgo:

  • Jerarquía estricta

  • Comunicación unidireccional

  • Poca escucha activa

  • Prioridad en los resultados sobre las personas

  • Toma de decisiones centralizada

  • Visión de los colaboradores como recursos ejecutores

Este modelo fue eficaz en determinados contextos: guerras, revoluciones industriales, economías de producción en masa. Pero comenzó a mostrar límites en contextos de cambio rápido, diversidad cultural, innovación constante y nuevas generaciones con otras expectativas.


🌱 2. El nuevo liderazgo: conexión, propósito y colaboración

Hoy en día, el liderazgo se comprende como una capacidad colectiva y dinámica, más cercana a la inspiración que al mando, más interesada en activar potencialidades que en imponer comportamientos.

🔑 Características del nuevo liderazgo:

  • Horizontalidad y trabajo en red

  • Enfoque en el propósito común

  • Estilo inclusivo y participativo

  • Escucha empática y comunicación bidireccional

  • Desarrollo de las personas y del equipo

  • Capacidad de leer el contexto y adaptarse

  • Reconocimiento de la diversidad como valor

El nuevo liderazgo no busca solo obtener resultados, sino crear sentido, facilitar el aprendizaje y generar bienestar sostenible. Ya no se trata de «mandar», sino de convocar, inspirar y construir confianza.


🔄 3. Diferencias clave: Viejo vs. Nuevo Liderazgo

Aspecto Viejo Liderazgo Nuevo Liderazgo
Estructura Jerárquica y vertical Horizontal, en red, colaborativa
Estilo de decisión Unilateral, autoritaria Participativa, distribuida
Comunicación Descendente, limitada Abierta, empática, bidireccional
Rol del líder Controlador, evaluador Facilitador, guía, servidor
Visión del equipo Recursos subordinados Personas con talentos únicos
Valor principal Eficiencia, obediencia Confianza, desarrollo humano
Motivación Externa (recompensa o castigo) Interna (propósito, sentido, reconocimiento)
Objetivo final Resultados y control Innovación, aprendizaje, transformación

🌍 4. ¿Por qué surge esta transformación?

El nuevo liderazgo no es solo una moda; responde a nuevas realidades globales:

  • Tecnología que acorta distancias y acelera procesos

  • Crisis complejas (climática, económica, social) que requieren soluciones colectivas

  • Nuevas generaciones con valores diferentes (autonomía, propósito, diversidad)

  • Cambio en el concepto de trabajo: del «empleado» al «colaborador»

  • Organizaciones más ágiles, descentralizadas y flexibles

  • Mayor necesidad de innovar, de aprender rápido y adaptarse


🌟 5. El liderazgo como una práctica integradora

Hoy se entiende al líder como alguien capaz de integrar:

  • Lo emocional con lo racional

  • Lo individual con lo colectivo

  • La acción con la reflexión

  • La tradición con la innovación

El nuevo liderazgo no desecha lo anterior, pero resignifica muchas de sus prácticas: la firmeza ahora convive con la escucha; la estrategia, con la sensibilidad; la autoridad, con el servicio.

🔁 El líder actual no es quien tiene todas las respuestas, sino quien hace las mejores preguntas.


🧠 6. Nuevas habilidades del liderazgo contemporáneo

  1. Inteligencia emocional: para gestionar relaciones y conflictos.

  2. Capacidad de adaptación: flexibilidad ante entornos cambiantes.

  3. Escucha activa y empatía: para comprender y conectar.

  4. Comunicación clara y auténtica: que inspire confianza.

  5. Visión sistémica: ver el todo más allá de las partes.

  6. Facilitación de procesos: más que dirigir, ayudar a avanzar.

  7. Autoconocimiento: liderar desde la autenticidad.


🕊️ 7. Del líder héroe al líder colectivo

La figura del líder como héroe solitario está siendo reemplazada por la del líder colectivo, que:

  • Reconoce que no lidera solo

  • Impulsa una cultura de liderazgos compartidos

  • Promueve la autonomía y el empoderamiento

  • Se enfoca en el desarrollo de otros líderes

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