El estilismo personal

Comercial 

El estilismo comercial se utiliza para vender productos y servicios de moda a un publico especifico. Las imagenes comerciales se transmiten a traves de los canales de promocion tradicionales como la television, el cine, los desfiles de moda, las vallas publicitarias (en calles, estaciones de ferrocarril o aeropuertos), las revistas y los catalogos, tanto impresos como online. En el entorno de compra de las boutiques, las imagenes comerciales son habituales en los escaparates, en el punto de compra (PDC) o durante la promocion de la apertura de una nueva tienda, en la que un edificio entero puede estar cubierto con un mensaje publicitario. Debido a que sus posibilidades digitales permiten una mayor creatividad, Internet tambien alberga imágenes comerciales, como los anuncios situados a ambos lados y en el encabezamiento de las paginas web, los que se abren en una nueva ventana mientras el consumidor realiza sus compras online o los videos desarrollados en exclusiva para la Red.

El estilista comercial

El estilista comercial trabaja con un abanico de clientes en multitud de proyectos diversos. El cliente es la piedra angular del proyecto comercial y, por tanto, el estilista debe estar orientado al cliente. El equipo comercial suele ser más amplio que el equipo editorial; junto al estilista trabaja el cliente, que puede tratarse de un integrante del equipo de marketing de la marca o de un diseñador que represente a su propia firma y, probablemente, un representante de la agencia publicitaria. Al equipo creativo (director, director de arte, fotógrafo, peluquero y maquillador) se suman los modelos o actores. Dependiendo del brief, es posible incluso que haya más personas involucradas en el proyecto; por ello es importante que el estilista sea un buen jugador de equipo, lo que le permitirá trabajar con otras ideas y sugerencias durante el proceso creativo.

El estilismo personal

El estilismo editorial ofrece más libertad creativa que el comercial; no obstante, los proyectos comerciales suelen comportar una mayor recompensa económica. En las altas esferas de la industria de la moda, es habitual que los estilistas que han aprendido la profesión en revistas pasen a trabajar para diseñadores y marcas internacionales, a menudo con el mismo equipo de fotografía y maquillaje. Por ello, las relaciones que formemos con nuestros colegas profesionales son especialmente importantes, ya que es posible que un cliente comercial contacte con algún fotógrafo experimentado para fotografiar un anuncio, y que este sugiera nuestro nombre como su estilista de preferencia para realizar el proyecto.

La publicidad de moda

Los anuncios comunican un mensaje o relatan una historia a un mercado objetivo; este mensaje o esta historia se hallan contenidos en el brief. El cliente, el estilista y el equipo creativo intercambian opiniones sobre el brief antes de la sesión fotográfica, para comenzar la selección del modelo, de la localización, de las prendas y del atrezo. No es lo mismo buscar prendas para proyectos comerciales que para proyectos editoriales, ya que en la publicidad de moda las imágenes promocionan una sola marca, boutique o diseñador, por lo que es probable que las prendas hayan sido seleccionadas de antemano. A menudo, son los compradores de moda, que se ocupan de planificar y adquirir las gamas de prendas para las temporadas venideras, quienes conocen los estilos clave y saben qué prendas esperan vender; por tanto, son los encargados de seleccionar, junto con los representantes del equipo de marketing de la marca, estas piezas idóneas para la sesión de fotos comercial o el spot publicitario.

El centro de atención de este tipo de anuncios comerciales son las prendas o los accesorios y, por tanto, la visibilidad del producto resulta esencial. El estilista es contratado para garantizar que las prendas estén planchadas, sienten bien a los modelos y tengan el mejor aspecto posible durante la sesión. Por descontado, siempre existen excepciones: si, por ejemplo, una marca de accesorios desea crear un anuncio de moda que muestre una fotografía de una modelo sosteniendo un bolso, el estilista deberá buscar por su cuenta prendas, calzado y joyas que completen el atuendo, siempre en concordancia con el planteamiento y el brief del cliente.

 El lookbook

Un lookbook presenta en sus páginas productos de moda; así, el estilista puede examinarlo y solicitar muestras específicas para una sesión de fotos. En ocasiones, los diseñadores utilizan imágenes de pasarela en sus lookbooks; en otros casos, las imágenes presentan un tipo de estilismo similar al de cualquier otro folleto o catálogo.

 El estilismo personal

Los estilismos para otro tipo de anuncios

Aunque en todas partes nos hallemos expuestos a la publicidad de moda, debemos mirar a nuestro alrededor y considerar las prendas que aparecen en los anuncios de empresas como bancos o supermercados, ya que estas también han sido buscadas y seleccionadas por un estilista, que ha vestido a cada una de las personas o actores que aparecen en el anuncio. Aunque los estilistas comerciales no sigan necesariamente las tendencias de moda, deben saber cómo desarrollar la indumentaria de un personaje determinado dentro de un brief comercial (véase el recuadro de la izquierda).

A menos que el estilista mantenga un buen contacto con las agencias de relaciones públicas, tomar prestadas las prendas puede resultar difícil, porque en este tipo de anuncios no se citan créditos por préstamo de ropa.

En la mayoría de los casos, el estilista tiene asignado un presupuesto para comprar las prendas; cuando se necesiten más artículos especializados, la ropa, el atrezo y el mobiliario pueden alquilarse previo pago de una tarifa. Los proyectos que requieren un vestuario específico, como los uniformes militares o la indumentaria étnica, no solo ponen a prueba la habilidad del estilista para encontrar las prendas sino también su conocimiento histórico y cultural del vestir. 

Si un famoso de renombre viste prendas de alguna marca en un anuncio, el agente de relaciones públicas puede generar cobertura de prensa (y publicidad gratuita) para la marca, dando a conocer que el famoso viste las prendas de la misma. Este tipo de promoción se denomina “emplazamiento de producto”, y también tiene lugar cuando los famosos visten determinado tipo de ropa en apariciones televisivas o en eventos de alfombra roja, de los que posteriormente se hará eco la prensa especializada.

 

El estilismo personal se trata de cómo una persona elige y combina prendas, accesorios y elementos de moda para expresar su personalidad, estilo y comodidad:

  1. Autoconocimiento: Conocer tu cuerpo, qué te queda bien y qué te hace sentir cómoda es fundamental. Saber cuáles son tus colores favoritos, tus prendas preferidas y qué estilo de ropa te identifica más.
  2. Adaptación a tu estilo de vida: Tu ropa debe adaptarse a tu día a día. Si tienes un estilo de vida activo, tu guardarropa debe ser funcional y cómodo. Si trabajas en un entorno más formal, necesitarás prendas adecuadas para ello.
  3. Versatilidad: Busca prendas versátiles que puedas combinar de diferentes maneras para crear varios looks con una sola pieza.
  4. Equilibrio y proporción: Aprender a equilibrar las proporciones del cuerpo con las prendas adecuadas es esencial para realzar tu figura.
  5. Accesorios y detalles: Los accesorios pueden cambiar por completo un atuendo. Aprender a usarlos puede ser clave para destacar o dar un toque único a tu estilo.
  6. Experimentación: No tengas miedo de probar cosas nuevas. La moda es un mundo creativo y cambiante, y experimentar con diferentes estilos puede llevarte a descubrir nuevas facetas de tu propia personalidad.
  7. Confianza: La confianza en ti misma es el mejor complemento para cualquier look. Sentirte bien contigo misma es lo más importante.

 

Editorial Luis Bonilla. Expertos en enseñanza, formación a distancia, tutores cualificados y con variedad de cursos online.

 

 

 

🎯 Elementos clave del estilismo comercial:

  1. Vestimenta adecuada al sector:
    No es lo mismo moda, banca o gastronomía. La imagen debe adaptarse al contexto sin perder autenticidad.

  2. Colores estratégicos:
    Transmiten emociones. Por ejemplo:

    • Azul = confianza

    • Negro = elegancia

    • Blanco = limpieza y transparencia

    • Rojo = acción y liderazgo

  3. Complementos sobrios pero potentes:
    Relojes, gafas, bolsos, corbatas o joyería deben hablar bien de ti, sin robar protagonismo.

  4. Cuidado personal integral:
    Cabello, manos, higiene, postura. La presencia física es parte del mensaje.


🧠 El estilismo también comunica valores:

Tu imagen puede reflejar:
✔️ Innovación
✔️ Cercanía
✔️ Profesionalismo
✔️ Creatividad
✔️ Autoridad
✔️ Modernidad

Facebook
Twitter
LinkedIn

Compártelo en redes

Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestra web. Si sigues utilizando este sitio asumimos que estás de acuerdo. VER