COACHING PARA DOCENTES (I y II) parte 15

COACHING PARA DOCENTES (I y II) parte 15

El desarrollo de habilidades en el aula

Tipos de preguntas

Hay preguntas que invitan a reflexionar y guían al otro hacia el buen camino, las hay que permiten dirigir y gestionar la comunicación, otras provocan emociones positivas o negativas, las hay que obtienen respuestas afirmativas o negativas, pero también hay preguntas que ayudan al desarrollo y facilitan el aprendizaje porque exigen ser escuchadas de forma activa.

Existen muchos tipos de preguntas, pero en este apartado nos vamos a ceñir a aquéllas que tienen función informativa: las preguntas abiertas y las preguntas cerradas.

PREGUNTAS ABIERTAS

Son aquéllas que animan al alumno a contestar de una manera extensa, elaborando sus respuestas y revelando en ellas, sus verdaderos pensamientos y emociones.

Su fin es conseguir que el alumno exponga sin tapujos sus ideas y reflexiones, son las auténticas preguntas de Sócrates. Las preguntas abiertas son mucho más eficaces que las cerradas para generar conciencia y responsabilidad en el proceso de coaching.

Todas empiezan por adverbios o pronombres interrogativos como:

QUIÉN –QUÉ -DÓNDE–CUÁNDO–CÓMO–CUÁNTO–CUÁL–CUÁLES

Las preguntas abiertas, aunque a veces se les podría criticar por su falta de precisión, tienen la gran virtud de iniciar el diálogo, de incitar al interlocutor a reflexionar y de evitar una respuesta del tipo “sí”, “no” o “quizás”.

Gracias a la metodología de este tipo de preguntas el interlocutor interviene de una forma positiva. Le permiten exteriorizar sus necesidades, sus problemas, sus temores, sus deseos y sus motivaciones, y expresar sus verdaderos sentimientos de forma amplia o precisa.

Las preguntas abiertas proporcionan información muy valiosa para mantener y dirigir un diálogo. Son un excelente método de investigación.

PREGUNTAS CERRADAS

Las preguntas cerradas son aquellas que requieren una respuesta corta, monosilábica: si, no o quizás, y por lo tanto, no tienen mucho valor para la práctica de coaching, aunque algunas veces son necesarias para verificar la información, resituar de nuevo al interlocutor en la discusión, confirmar que se ha comprendido bien, etc. Por lo general, empiezan con un verbo.

Suscitan respuestas breves, claras y precisas, que no invitan al diálogo.

Más vale evitarlas excepto en algunos casos concretos y estudiados a conciencia.

Las preguntas cerradas delimitan el marco de la respuesta de una forma tan estrecha, que dejan pocas posibilidades de iniciativa al interlocutor.

La pregunta ¿Por qué? “¿Por qué?” es la pregunta menos útil en coaching. Cuando se le pregunta a alguien por qué ha hecho algo, la respuesta puede pertenecer a dos categorías:

  • La secuencia de acontecimientos que condujo a esa acción.
  • O el motivo de la acción.

Las preguntas que empiezan con “por qué”, tienden a proporcionar una justificación por respuesta y poca información útil. Preguntar ¿por qué?, no es aconsejable ya que, a menudo, implica una crítica y pone al alumno a la defensiva.

La utilización de este tipo de pregunta por parte del profesor lo único que puede generar es una pérdida de sintonía con el alumno, porque la respuesta a esa pregunta generará una serie de justificaciones que el alumno tendrá que defender.

Además, “por qué” suele oírse como una acusación, y el alumno se pondrá a la defensiva. En vez de “por qué”, el profesor debe hacer preguntas basadas en “cómo” y “qué” para obtener la información necesaria para trabajar en el aula.

 

Las preguntas se pueden clasificar en varios tipos según su propósito y la información que se busca obtener. Aquí tienes algunos tipos comunes de preguntas:

  1. Preguntas Abiertas: Estas preguntas requieren una respuesta detallada y no se pueden responder con un simple «sí» o «no». Se utilizan para fomentar la reflexión y obtener información completa. Ejemplo: «¿Puedes explicar tu punto de vista sobre este tema?»
  2. Preguntas Cerradas: Estas preguntas suelen tener respuestas cortas, como «sí» o «no», o una opción predefinida. Se utilizan para obtener respuestas específicas y suelen ser útiles para recopilar datos concretos. Ejemplo: «¿Has terminado tu tarea?»
  3. Preguntas Semicerradas: Estas preguntas ofrecen opciones limitadas para responder, pero permiten una respuesta más allá de «sí» o «no». Pueden ser útiles cuando se busca obtener información específica de manera eficiente. Ejemplo: «¿Prefieres el color rojo o azul?»
  4. Preguntas de Elección Múltiple: Presentan una serie de opciones de respuesta, y el respondiente elige una o varias de ellas. Son comunes en exámenes y encuestas. Ejemplo: «¿Cuál de las siguientes opciones es una fruta? (a) Manzana, (b) Coche, (c) Silla.»
  5. Preguntas de Opción Múltiple: Similar a las preguntas de elección múltiple, pero el respondiente puede seleccionar más de una opción correcta. Ejemplo: «Selecciona todas las frutas: (a) Manzana, (b) Coche, (c) Plátano, (d) Naranja.»
  6. Preguntas de Rango o Escala: Piden al respondiente que califique o clasifique algo en una escala, como del 1 al 10, para medir la intensidad, importancia o satisfacción. Ejemplo: «En una escala del 1 al 5, ¿qué tan satisfecho estás con nuestro servicio?»
  7. Preguntas Retóricas: Estas preguntas se hacen más para expresar una opinión o punto de vista que para obtener una respuesta directa. A menudo, la respuesta es obvia o implícita. Ejemplo: «¿Acaso no es evidente que debemos cuidar el medio ambiente?»
  8. Preguntas Hipotéticas: Plantean situaciones imaginarias o escenarios para explorar cómo alguien reaccionaría en ciertas circunstancias. Ejemplo: «¿Qué harías si ganaras la lotería?»
  9. Preguntas de Clarificación: Se utilizan para obtener más detalles o aclarar lo que alguien ha dicho. Suelen comenzar con palabras como «¿Puedes explicar…?» o «¿Puedes darme más información sobre…?»
  10. Preguntas Retrospectivas: Dirigidas hacia el pasado, estas preguntas buscan obtener información sobre eventos o experiencias pasadas. Ejemplo: «¿Qué hiciste el fin de semana pasado?»
  11. Preguntas Prospectivas: Dirigidas hacia el futuro, estas preguntas exploran planes, metas o expectativas. Ejemplo: «¿Qué planeas hacer durante tus vacaciones?»
  12. Preguntas de Sondeo: Se usan para evaluar el conocimiento o la comprensión de alguien sobre un tema específico. Ejemplo: «¿Puedes decirme qué sabes sobre la Revolución Industrial?»

La elección del tipo de pregunta depende del propósito de la conversación o la investigación, y cada tipo de pregunta tiene su lugar y utilidad en diferentes contextos. La habilidad para formular preguntas efectivas es importante tanto en la comunicación cotidiana como en investigaciones más formales.

 

Editorial Luis Bonilla. Expertos en enseñanza, formación a distancia, tutores cualificados y con variedad de cursos online.

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on linkedin
LinkedIn

Compártelo en redes

Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestra web. Si sigues utilizando este sitio asumimos que estás de acuerdo. VER